Recuerdan que les conté que me iba a meter en el mundo de desarrollo y hospedaje de páginas web? Decidí publicar aquí algunos de los trabajos que haga.
Francisco es un chamo que conocí un mes antes de venirme para Australia a través de la red social de Viva en Australia. El fue mi compañero de rumba en esos primeros meses pre-familia y es ahora mi compañero de ping-pong los fines de semana.
Este es su sitio web.
Por alguna razón tanto Enzo como yo tenemos una obsesión con los parques. A él le gustan los columpios y trampolines diferentes en cada parque al que vamos y a mí me gusta verlo mientras se divierte.
Aunque a veces es medio fastidiosito porque cada vez que pasamos por el frente de un parque Enzo me hala la mano para que lo lleve y terminamos deteniéndonos casi que un vez por cuadra.
El fin de semana fuimos al Centro Acuático y justo al frente queda un parque bien bonito. Así que continuando mi serie de parques de Adelaide aquí les dejo unas fotos...
y algunas del centro acuatico…
Debo confesar que fue un desastre. Resulta que mientras preparaba mi declaración para el año 2011 me di cuenta que yo había empezado a trabajar el 28 de Junio del 2010 y el periodo fiscal termina el 30 de Junio. Así que oficialmente tuve ingresos en el año 2010. Y, por dos miserables días me había convertido en un evasor de impuesto.
Como en la empresa no me descontaron impuestos por esos dos días lo que debía hacer era un “Non-lodgement advice” (ni idea como se traduce eso), pero como debía hacerla para el año anterior no podía encontrar el formulario, ni en línea, ni en el sitio web de la oficina de impuestos (porque no supe buscar).
Decidí entonces enviar una carta a la oficina de impuesto explicando mi situación: como recientemente había llegado al país, como únicamente había trabajado 2 días en el periodo fiscal, y como tenía una esposa e un hijo que alimentar.
Un par de días después recibí un paquete con el formulario y lo envíe. Yo me esperaba una carta que me dijera que el no conocimiento de las leyes no me eximía de ninguna responsabilidad y junta a ella una multa por el pecho, pero lo único que contenía era el formulario, así que lo llené, lo envié y listo.
Ya resuelto ese problema quedaba el de hacer la declaración para el año en curso. El sistema de impuesto no es muy difícil de comprender en Australia. Con cada pago de impuesto la empresa te descuenta cierto porcentaje de tu salario y lo declara al gobierno. Al final del año tu le informas de tu situación social y económica al gobierno y ellos (o tu contador) determinan cuanto impuestos debes pagar. Si lo que pagaste por adelantado (lo que te descontó la empresa) es mayor de lo que debes pagar entonces te devuelven la diferencia (mas intereses) de lo contrario tu le pagas a ellos la diferencia.
Desde hace unos años el gobierno ha estado promocionando un software llamado “e-tax” que puedes descargar y utilizar para hacer tu declaración. El funcionamiento es bastante sencillo. El sistema comprueba tu identidad y pre-llena una gran parte de los campos de la declaración utilizando información que tu empleador, tu banco e otras instituciones han proporcionado a la oficina de impuesto. La interface es bastante amigable y te recibe con un mensaje de la ATO (oficina de impuestos) que te asegura que no debes temer a realizar tu declaración y que mientras la hagas de buena fe no habrían mayores consecuencias de realizarla mal.
Para el momento en el que yo empecé a hacer mi declaración mis datos no estaban disponibles todavía y el sistema me proponía o esperar o llenarlos manualmente. Como yo tenía todos mis documentos incluyendo el reporte de la empresa que especifica el total de ingresos que percibiste en el año y cuanto impuesto declararon en tu nombre decidí llenarla manualmente.
Como contador y como contador que hizo varias declaraciones de este estilo en Venezuela confieso que no fue tan fácil como me lo esperaba. Tuve varias dudas con algunas cosas, pero aun así impacientemente envié la declaración.
A los pocos días me llego un carta informándome que debido a ciertos elementos extraños en mi declaración había sido escogido para una auditoria y que debía enviarles por correo los documentos de soporte de todos los datos incluidos allí, así como el nombre y los detalles de la persona que me ayudó a hacer la declaración.
Me abuse a mi mismo verbal y mentalmente por: primero, no haber esperado a que los datos estuvieran disponible para evitar errores y segundo, por no pagar 70 miserables dólares para que un experto me hiciera la declaración. Así que recolecté los documentos exigidos y los envié junto con otra carta explicando mi situación: como recientemente había llegado al país, como había decidido ignorantemente hacer la declaración yo mismo y como para el próximo año definitivamente iba a contratar a un especialista y como tenía una esposa e un hijo que alimentar que probablemente necesitarían ropas nuevas para afrontar el invierno venidero y ese tipo de cosas.
Alredor de 2 semanas después me devolvieron todos mis documentos y un estado de cuenta que me informaba que yo había aportado al fisco mas ingresos de lo necesario para el año y que por lo tanto me habían depositado en mi cuenta $3000 incluyendo intereses.
Así me sentí cuando utiliice mi tarjeta para comprar por internet un libro en estados unidos y que me lo enviaran hasta mi casa.
Compré un libro de informática que había encontrado en una biblioteca aquí. El libro me pareció tan bueno que decidí agregarlo a mi colección. Era un libro viejo, así que iba a ser difícil encontrarlo en una librería, además de costoso. Así que busqué en Ebay y lo compré usado por 3 insignificantes dolaritos. Aunque tuve que pagar $10 por el envío desde USA hasta Australia.
Cero preocupaciones por cupo de dólares, tramites de Cadivi o incluso por el alto costo de conversión ya que la moneda aquí es igualmente fuerte y después de terminar la transacción me sentí libre. Libre para comprar lo que quiera, en la moneda que quiera y donde sea.
Me sentí, por primera vez, como si el mundo fuera un campo de juego donde todos tienen acceso y yo podía entrar libremente. Excepto claro, por aquellos con padres sobreprotectores que no los dejan jugar en él.
Ya lo sabía. Mientras me dirigía a la oficina donde el gerente general de la empresa me había dicho que quería hablar conmigo, ya sabía que era por eso. Mi jefa me acababa de enviar un email informándome que me acababan de aumentar el sueldo. Supongo que debido a todo el fiasco de la reunión pasada ellos creen que a mi no me gusta que me den ese tipo de noticias personalmente.
De cualquier forma, por que subirme el sueldo si no era para ofrecerme una nueva posición? así que de camino a la reunión estaba completamente concentrado en quitarme la sonrisa de gafo de oreja a oreja que cargaba.
Terry fue directo al grano. ¨Queremos abrir la posición de especialista de IT y queremos que tu la ocupes¨. Chequeé y la sonrisa estaba bajo control. Procedió a explicarme que debido a todos los proyectos que se quieren desarrollar habían decidido que lo mejor era tenerme tiempo completo dedicado en ellos para reducir el tiempo de desarrollo.
También me dijo, que como es una posición nueva todavía no tenían definido mis responsabilidades ni el alcance de la misma y que sería una situación de como vaya viniendo vamos viendo. Una nueva persona sería contratada cuyo trabajo sería exclusivamente la contabilidad.
También discutimos los planes de expansión de la empresa y como eso aumentaría la carga de trabajo sobre mi jefa directa, así que yo pasaría a ayudarla a ella y a recibir algunas de sus tareas dependiendo de mi disponibilidad de tiempo. Así que el trabajo todavía tendrá un componente contable, pero con tareas de mas alto nivel.
Terry empezó unos de sus discursos de ochocientos cincuenta mil años y mientras tanto yo empecé a pensar en todo el esfuerzo echo en este año y como estaba empezando a rendir frutos. Para mi terror empecé a sentir un poco de humedad en los ojos. No es que iba a llorar ni nada por el estilo, sino que deje que el orgullo me embargara por unos cuantos segundos y fue justo en ese momento que Terry termino y me pregunto “Todo esto te parece bien? Aceptas la posición?” y tanto el como mi jefa directa (que también estaba allí) me miraron fijamente a los ojos esperando mi respuesta.
Debo confesar que no ha sido fácil. La parte contable de empresa es extremadamente compleja. No es una sino varias empresas y la principal compuesta por varios centros de costos de acuerdo a los diferentes estados del país. Al sumarle a todo esto todos los proyectos de informática que he tenido que desarrollar se ha traducido trabajar frenéticamente, sin descansar, en la empresa para no retrasarme y desarrollar los proyectos de informática mayormente en la casa porque nunca hubiese contado con suficiente para desarrollarlos en la empresa, o probablemente si, pero solo lo que se requería sin dar ese extra paso que hace la diferencia.
Supongo que es mejor cuando las cosas no se dan tan fácilmente porque así las puedes apreciar mejor, no creen? claro que si. Creo que el problema no es poner el esfuerzo, sino mas bien la incertidumbre de si se recibirá la recompensa o no y aunque la vida es complicada y no siempre te recompensa o te da lo que esperas yo creo que si se pone de nuestra parte las probabilidades de alcanzar esos sueños se incrementan enormemente. El resto es tener paciencia y aguante para no desistir a mitad de camino.
Ahora empieza una nueva fase en este proyecto y es demostrarles a la empresa todo lo que tengo para ofrecer. Ahora con tiempo suficiente para dedicarle a todo esto voy a poder empezar a disminuir mis lista de como 40 proyectos pendientes que antes solo crecía. Va a requerir bastante trabajo y estudio y muy probablemente a seguir trabajando desde la casa, pero en mi plan inicial yo me había establecido 5 años así que todavía debo 4 años de trabajo como burro.
Hace un par de meses atrás tuve la oportunidad de volver a hacer una de las cosas que más disfruto en esta vida. Jugar basquetbol.
Un grupo de chamos venezolanos empezó a reunirse una vez a la semana a jugar unas caimaneras. Un amigo me invitó y pude a volver a disfrutar de algo que, cuando estaba en el colegio, hacía todos los días.
Nos reuníamos los jueves después del trabajo. Como estábamos en verano no oscurecía sino hasta las 8 o 9 de la noche, así que podíamos disfrutar de unas 3 o 4 horas de juegos, que eran más que suficientes porque siendo puros treintones 10 minutos después de comenzar, yo por lo menos, estaba que necesitaba oxigenación artificial.
Sin embargo las partidas no se pudieron mantener durante mucho tiempo. Ya para la cuarta semana el verano se estaba acabando y empezó a oscurecer a las 7:30 lo cual me dejaba sintiendo como niño al que le daban un juguete y se lo quitaban cuando estaba más emocionado armando batallas interestelares. A la quinta semana quitaron el Sistema de Ahorro por luz del día, que es esa cuestión por la que adelantan o retrasan los relojes para aprovechar los días mas largos y a las 6:30 ya era oscuro así que no pudimos seguir jugando.
Pero, los juegos no se acabaron allí. Uno de los chamos era realmente apasionado con el básquet (alrededor de 100 veces más que yo) e hizo averiguaciones para inscribirnos en una liga local.
El deporte en Australia es muy fomentado y se pueden encontrar ligas sociales para básicamente cualquier deporte. En estas ligas se reúnen personas de todos los niveles a practicar los deportes que le gustan. Unos con la idea de hacer ejercicio, otros para mejorar y otros porque, simplemente no tienen nada mejor que hacer. Recuerdo que por esa última razón estudié informática y ahora es una de mis pasiones. Escribiendo esto me doy cuenta que tengo muchas pasiones. Me pregunto porque. Voy a pensar en eso.
El costo de la inscripción en la liga fue de $80 por el equipo y en cada partido cada integrante debía pagar $9. Estoy cubría las instalaciones (canchas de tabloncillo bellísimas con tablero de puntos electrónico) y los árbitros que evitaban que los partidos se convirtieran en una guerra a muerte. Además colocaban los resultados en el sitio web del centro de deportes para que llevaras tus estadísticas.
Así comenzamos la llamada “temporada de invierno” y pude por primera vez en mi vida jugar basquetbol como debe ser: a cancha completa, en canchas de taloncillo y con árbitros y todo. Estaba disfrutando cada minuto a pesar de que nos echaban una pela en cada partido.
Sin embargo, el ambiente en el equipo se estaba oscureciendo. Supongo que quizás el hecho de perder tantos juegos hacía que el ganar fuera más importante y toda la experiencia estaba dejando de ser un momento para disfrutar y hacer algo que a uno le gusta para convertirse en una obligación y presión por ganar.
Así que decidí salirme del equipo. Fue una decisión difícil porque significaba que iba a perder la única oportunidad que había tenido en tanto tiempo de jugar basquetbol. En realidad no me importaba el perder, más bien era el motivante para mejorar y hubiese hecho que cuando empezáramos a ganar las victorias fueran mucho más dulces, pero si me importaba el no jugar para divertirme porque al final del día eso es lo que el basquetbol es para mí. Una diversión.
Mientras me decidía pensaba “bueno Gian cálatela. Todo tiene un precio y ese es el de poder jugar”, pero al final decidí que no me la iba a calar. Yo estoy en una nueva etapa de mi vida. “La calma después de la tormenta” yo la llamo y ya no necesito aguantar elementos en mi vida que me causen estrés.
Envié un correo electrónico al equipo explicando que no iba a ir mas a los juegos e inmediatamente sentí el peso disminuir de mis hombros. Algunos de los chamos me llamaron para hablar de la situación y me dio también lástima porque algunas de las personas que estaban en el equipo eran de ese tipo de personas de la cual uno disfruta estar cerca, pero la decisión había sido tomada.
Ahora solo me resta encontrar el club de tenis de mesa más cercano e inscribirme. Nunca les dije que una de mis pasiones cuando estaba en el colegio era el ping-pong cierto? Pues sí. Yo tenía una mesa en mi casa y 2 de mis vecinos eran unos de los mejores jugadores del colegio. Jugábamos todas las semanas No puedo esperar a que vuelva a sostener una raqueta en la mano después de mas de una década.
Hoy 28 de Junio del 2011 cumplimos el primer requisito para poder optar para la residencia permanente y quedarnos en Australia em… pues… permanentemente. Cumplí un año en el trabajo.
Nosotros nos vinimos con una visa 475 que nos ofrece una serie de beneficios y también exige ciertas.
Entre los beneficios que tenemos están:
Entre las exigencias están:
La visa tiene una duración de 3 años. Después de ese tiempo deberíamos hacer nuestras maletas y regresarnos a Venezuela o como yo cariñosamente la llamo, El lugar donde los sueños mueren. Sin embargo, la visa te hace muy fácil el optar a una residencia permanente. Para ello debes cumplir 3 requisitos.
El primero es trabajar, al menos, durante un año el equivalente a una posición tiempo completo. lo digo de esta forma porque pudieras tener 2 trabajos medio tiempo e igual te serviría.
Lo que me asustaba de este punto es que yo creía que debías trabajar en una posición a fin con la carrera que postulaste en tu visa, contador en mi caso. Esto me asustaba porque que pasaba si no conseguía trabajo en esa área y tenía que limpiar o algo por el estilo? ciertamente estaba dispuesto a hacerlo, pero mi plan era mas a largo plazo.
Resulta que este miedo era totalmente infundado y ya conozco muchas familias que no han trabajado en sus áreas e igualmente le otorgan la residencia permanente (si cumplen el resto de los requisitos).
El segundo y tercer requisitos son mas sencillos. Debes vivir en el estado durante al menos 2 años, y si no cumpliste el primero, desde hace rato te hubieras regresado. Y, portarse bien (tratar de no hacer algo que te haga parar en la cárcel). Hasta donde sé no es costumbre de los policías aquí agarrarte a ti y a tus amigos mientras andas de parranda y meterte preso para martillarte BsF2000, así que no creo que vallamos a tener problema en esta área tampoco.
Ahora que ya un requisito esta cumplido solo resta esperar hasta Mayo/20(chuquiti) cuando cumpla mi segundo año de haber llegado y tendré la opción de solicitar la residencia permanente y quedarme, si quiero, eh… permanentemente.
Como no es secreto que esto por aqui medio me gusta, les puedo decir que si lo voy a hacer.
Continuándo mi serie de “Parques en Australia” les dejo fotos del Memorial Gardens. Este parque queda justo al lado del mini centro comercial donde hago mis compras de viveres y es una de mis áreas favoritas de la ciudad.
De hecho, esa área se le podría considerar como el centro del suburbio donde vivo y es donde están ubicados varios organismos importantes como el consejo, el museo, la iglesia principal y me adorada librería que tantas alegrías me ha traído.
Además de todo tipo de establecimintos que puedas necesitar como restaurantes de comida rápida, tiendas de ropa, agencia de seguro, panaderia, farmacia, licoreria, heladeria, tienda de juguetes, tiendas por departamentos, etc
Aquí les dejo unas fotos del parque:
Ya para el jueves estaba obstinado. Destilaba agresividad hasta por los poros. Definitivamente era una de las peores semanas que había tenido desde que estoy aquí y la cosa se ponía peor.
El lunes Ross, el jefe de la empresa (en realidad es el dueño no el jefe), me pregunto si podíamos tener una reunión del sitio web ese día. Le dije que si podíamos, pero que no tenía nada nuevo aparte de lo que se mostró en la reunión pasada. Como se acercaba el fin de mes estaba pegando carreras para cerrar las cuentas antes de la fecha tope y no había podido dedicar mucho tiempo al sitio web. Vi decepción en su cara y me hizo sentir mal.
La cuestión con Ross es que sería el hombre mas feliz del planeta si pudiéramos tener una reunión del sitio web cada 4 horas. El, en su corazón, es un vendedor. Uno muy bueno por cierto, y como tal le da mucha importancia a todo lo que se relacione al marketing. El nuevo sitio web que estamos desarrollando es en estos momentos su hijo preferido.
Los siguientes días no fueron mejores. Algunos de los gerentes de estados no habían entregado las facturas de sus gastos completas y mi jefa me dijo que tenía que insistirles hasta que me las entregaran TODAS. Esto por supuesto no es algo que yo disfruto ya que implica fastidiarlos constantemente. Hizo que ese mal sabor de boca que traía se volviera un poco peor.
Martes y Miércoles fueron terribles con el teléfono. Desde que entre en la empresa me dijeron que en la temporada alta TODO el mundo debe ayudar con el servicio al cliente, ya que las llamadas se disparan y sobrepasan la capacidad de la gente especializada en eso. Sin embargo, las ventas de la compañía se han mantenido relativamente alta en estos meses y por ende el número de llamadas no ha disminuido lo suficiente.
Como resultado, tengo que atender alrededor de 4 o 5 llamadas por día que, aunque se disfrutan porque te dan la oportunidad de resolver el problema de alguien y de practicar inglés (ayudando a resolver así mi propio problema de comunicación), tienen el lado negativo que me desconcentran de mi trabajo principal y me restan tiempo valioso que necesito para cerrar el mes a tiempo y desarrollar los proyectos en los que estoy trabajando.
Para colmos el martes tuve juego de basketball (Si estoy en un equipo de basket yai!!, después les cuento) y nos volvieron a echar una pela para variar.
Todo estas cosas las tuve en la cabeza durante toda la semana y mientras mas pensaba en ello mas me molestaba. En la entrevista de trabajo me habían dicho que iba a hacer servicio al cliente solo en la temporada alta y aquí estaba, meses después de esta haber terminado, atendiendo el teléfono y usando mi limitado tiempo disponible en cosas que no me correspondían.
El jueves exploté. Fue una pequeña explosión, pero fue la primera vez que externalicé mi frustración y me asusto. Ese día tuvimos una de esas mini reunión de oficina donde cada quien saca algún punto que considere importante y se discute.
En estas reuniones normalmente se solicita un voluntario para tomar las minutas. y, por supuesto, nadie se ofrece. Ese día, sin embargo, fue diferente. Mientras me acercaba a la reunión mi jefa me dijo que trajera un cuaderno porque era mi turno de tomar las minutas.
La visión se me torno roja al momento y me molesté bastante porque ni siquiera se me pregunto si quería ser voluntario. Fue en ese momento que tuve mi mini explosión. Fue instantánea. Ni siquiera lo pensé. Busque la libreta en mi escritorio y mientras me acercaba al circulo les dije en un tono bien acido y fuerte “Ok, pero si quieren que haga esto van a tener todos que hablar bien despacio”
Tuve suerte, porque todo el mundo se lo tomo a juego y se empezaron a reír. Eso me dio tiempo para calmar mis ánimos. Si hubiese alguien respondido a mi comentario en ese momento no quiero ni pensar como hubiese reaccionado, pero si se que hubiese terminado conmigo ofreciendo mi renuncia por la pura pena. Aunque si sé, que mi jefa si se dió cuenta que no había nada de gracia en mi comentario. Ella es mujer, lo cual le permite captar rápidamente ese tipo de cosas y, además una de las mujeres mas inteligentes que he conocido en mi vida junto a mi mamá y a mi madrastra.
Ese día, después del trabajo, estuve pensando bastante en todo lo sucedido y lo único que gané fue molestarme conmigo mismo. Aquí estoy, en lo que yo considero el mejor pais del mundo. Tuve la fortuna de trabajar en mi área desde el principio. Se me respeta y se me aprecia en el trabajo, mejor aún me lo expresan verbalmente. El dinero ocupa una posición bastante baja en mi lista de problemas. Quieren saber que esta de primero en mi lista de problemas: el frio. Si el frio. Nos les parece eso como el mejor mayor problema que se puede tener en el mundo? Solo me quejo de que no pude llegar aqui antes. Mejor aún nacer aquí no me hubiese molestado para nada.
Y, a pesar de todo lo anterior, aquí estaba sintiéndome demasiado importante como para tomar minutas, solo porque me habían invitado a un par de reuniones de directores. Desagradecido fue mi conclusión al momento.
Todo esto me calmó los ánimos bastante y fue el viernes al trabajo mucho mas relajado. Alrededor de las 10 de la mañana dos de mis jefes me dicen que los acompañe porque tienen algo que hablar conmigo. Inmediatamente me llego a la cabeza mi mini explosión del dia anterior y empecé a preparar mi defensa.
No iba a negar que estaba molesto. Tampoco iba a ocultar lo que me tenía molesto. Lo iba a poner todo ahí sobre la mesa de la forma mas calmada posible. Y después, les iba a decir que no se tenían que preocupar por eso. Que si esas cosas me molestaban era mi problema no el de ellos. Que estaba consciente que mi posición era la de “Asistente Contable” haciendo enfasis en el “asistente” y que recordaba perfectamente que estas cosas se me habían dicho en la entrevista de trabajo. Por lo tanto, aunque no fueran mi cosas favoritas las iba a hacer y que podían estar tranquilos porque no volvería a externalizar mi frustración como lo había hecho el dia anterior.
Cuando nos sentamos en la mesa, puse mi cara de póquer (mejor conocida en Venezuela como cara de culo) y pregunté de forma firme “Que paso?”. Michael tomó la palabra. “No es nada Gian, solo queríamos decirte que estamos muy contento con tu trabajo, especialmente Ross, y queremos mostrarte nuestra gratitud por las cosas que estas haciendo ofreciéndote un aumento de sueldo. Estamos dispuestos a ofrecerte un 10% de aumento si eso te parece bien”.
Permanecí en silencio, mirándolo directamente a los ojos con mi cara de poquer, pero por dentro de mi podía sentir un pequeño idiota con una sonrisa de oreja a oreja haciendo todo tipo de danzas de victoria ridículas y me encontré deseando tener una hojita para empezar a tomar notas de todas las cosas que se estaban diciendo en la reunión para que no se les fuese a olvidar.
No sabía que hacer, por un lado había entrado en la reunión en modo “negociación”. Ninguna emoción iba a escapar a la superficie. Pero por otro lado, quería saltar la mesa y darle un beso a mi jefe, sin embargo, eso podía resultar en perder mi aumento o que me lo incrementaran aún mas. Decidí no arriesgarme y descarte la idea del beso.
Sin embargo, mientras pensaba todo esto había perdido mi concentración y tenía la sonrisa mas idiota en la cara que se pueda tener, así que simplemente la dejé salir completamente y respondí “Si! me parece muy bien!”
Una chica me pidio una vez que publicara fotos de los increibles parques que se pueden ver por aca. Me parecio una excelente idea y me propuse crear una sección exclusiva para ello.
Eso fue hace como 8 meses atrás y ya me había olvidado completamente de ello cuando hoy, camindo con Enzo, nos encontramos con el parque que podrán observar en las fotos y me parecio tan hermoso que decidí hacer honor a la petición de la chica.
Al principio creí que había llegado a un parque nuevo, pero después me di cuenta que ya había estado allí en una fiesta de cumpleaños a la que Enzo fue invitado. Es muy común por aquí celebrar los cumpleaños en los parques y es que la disponiblidad es tanta que como no tomar provecho de ella. Además es gratis y en la mayor parte de ellos hay areas para niños cercadas de manera que no se te escapen sin darte cuenta, parrilleras para preparar la comida y hasta baño para echar una …, bueno ustedes saben para que.
El parque que les presento hoy se llama “Souter Park” y queda en un suburbio llamado Goodwood. En la siguiente foto lo ven resaltado. Es bastante grande, sin embargo comparenlo con los que rodean la ciudad. En esos si estas parado en un extremo tu vista no alcanza a ver el otro.
